El cargamento decomisado fue avaluado en $1.452.500. Desde la modificación a la ley de Ordenanza de Aduanas, delitos de esta magnitud arriesgan penas de cárcel.

581 cajetillas de cigarrillos de distintas marcas fueron incautadas en la comuna de Rancagua, en un procedimiento coordinado por la Sección de Investigaciones Policiales de la 1ª Comisaría de Rancagua, que equivale a una evasión tributaria de $1.162.000.

La fiscalización se realizó en la esquina de Avenida Kennedy con República, donde se detuvo a un comerciante informal situado en el sector, el que posteriormente fue puesto a disposición de la fiscalía local de la comuna. El procedimiento terminó con la incautación de una mercancía equivalente a 58,1 cartones de cigarrillos, avaluada en $1.452.500.

Cabe destacar que delitos de este tipo arriesgan penas incluso de cárcel, ya que en mayo de este año se aprobó el Proyecto de Ley que modifica la Ordenanza de Aduanas en materia de endurecer las sanciones al delito del contrabando de cigarrillos, que implica en el caso del delito por sobre las 25 UTM, la condena de multa entre 1 y 5 veces el valor de la mercancía, y la privación de libertad en sus grados medio a máximo (541 días a 5 años).

Un estudio realizado por la Universidad Católica MideUC apunta que el 21,4% de los cigarrillos comercializados a nivel nacional corresponden a ilícitos. El mismo documento concluye que solo este delito le genera pérdidas al Estado cercanas a los US $500 millones al año por evasión tributaria.

Según el último informe “Contrabando de cigarrillos como forma de criminalidad organizada” de la académica de la Usach, Lucía Dammert, controlar el contrabando es de suma relevancia debido a su vinculación con otros mercados ilícitos a través del crimen organizado: como lo es el narcotráfico, la trata de personas, el tráfico de armas, migrantes y otras mercancías que incluye también a las que son permitidas en la economía legal, como los cigarrillos.