Tres gendarmes y once internos quedaron lesionados tras los enfrentamientos.

Tras la agresión de un interno epiléptico descompensado a un gendarme y el posterior allanamiento, se provocó un desorden al interior del módulo 52 del Centro Penitenciario de Rancagua que dejó trece lesionados, el más grave, un funcionario de Gendarmería que habría sido apuñalado. El resto de los condenados y funcionarios, presentaban lesiones leves.

Para ponerse al tanto de la situación, el Defensor Regional, Claudio Aspe, llegó hasta el penal rancagüino donde tras recibir la versión del Director Regional de Gendarmería, Coronel Leandro Pincheira, y el alcaide, Comandante Álvaro Millanao, solicitó entrevistarse con los internos involucrados, para escuchar su versión y constatar las lesiones que recibieron.

Claudio Aspe le explicó a los condenados los procedimientos a seguir por parte de la Defensoría, que por lo pronto será la entrevista con l defensor de turno, en caso que alguno de los involucrados pase a formalización.