El operativo encabezado por fiscales anticorrupción y agentes de la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad de la Policía de Perú es parte de una investigación preliminar contra la mandataria por presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito. El primer ministro Gustavo Adrianzén declaró manifestó su indignación por lo ocurrido, afirmando que se ha producido “un intolerable atropello a la dignidad de la Presidencia de la República y a la nación”.
(EFE/CNN Chile) – La casa de la presidenta de Perú, Dina Boluarte, fue allanada cerca de la medianoche del viernes por un equipo de fiscales y agentes de la Policía Nacional como parte de una investigación preliminar abierta contra la gobernante por la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito.
En imágenes mostradas por medios locales, se observa cómo un grupo de agentes rompe la cerradura de la puerta principal de la vivienda de Boluarte en el distrito limeño de Surquillo tras no ser atendidos al tocar repetidas veces en la casa.
Los medios locales informaron que la gobernante no se encuentra en su domicilio y que en el lugar solo estaba uno de sus hijos, aunque luego llegó uno de los abogados de la mandataria, mientras que el Ministerio Público aún no ofreció ninguna información formal sobre la intervención.
Según la emisora RPP, el allanamiento con fines de registro de incautación fue aprobado por el juez supremo Juan Carlos Checkley tras un requerimiento presentado por el fiscal general, Juan Carlos Villena, como parte de la investigación de la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito, en la modalidad de omisión de consignar declaraciones en documentos.
El caso
La Presidencia de Perú y el Ministerio Público han mantenido durante los últimos días una controversia respecto a las diligencias iniciadas como parte de la investigación abierta por la supuesta falta de declaración de la gobernante de sus relojes de lujo.
El pasado miércoles, la Fiscalía denunció que se frustraron las visitas a la gobernante tanto en su domicilio, como en el Palacio de Gobierno, mientras que la Presidencia aseguró que representantes del Ministerio Público fueron atendidos por personal del despacho de Boluarte, quienes recibieron una notificación para la mandataria.
El fiscal supremo Hernán Mendoza declaró ante la Comisión de Fiscalización del Congreso que la mandataria “había frustrado” las investigaciones al no acudir a las citaciones hechas para el martes y el miércoles de esta semana.
Tras esa situación, la defensa legal de Boluarte pidió reprogramar las diligencias en la investigación del caso de los relojes de lujo que la mandataria no declaró y por el cual es investigada por enriquecimiento ilícito.
En respuesta a este pedido, el fiscal general comentó que la actitud de la mandataria era un “claro indicador de rebeldía” que no hace más que “retardar el resultado de la investigación”.
El pasado 18 de marzo, el Ministerio Público inició diligencias preliminares a Boluarte por este caso, ya que la mandataria debería haber declarado dichos bienes en su registro de propiedades ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y la Fiscalía apuntó que no lo hizo.
Sin embargo, Boluarte declaró la semana pasada que estaba comprometida a acudir a la Fiscalía para responder sobre esta investigación y afirmó que no tiene ningún desbalance patrimonial.
El Canal N de televisión mostró imágenes en las que se ve que un numeroso contingente policial se mantiene durante la madrugada de este sábado vigilando los alrededores de la casa de la mandataria, mientras que en el interior permanecían agentes de la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía Nacional junto con un equipo de fiscales.
Allanamiento al Palacio Gobierno de Perú
El equipo de fiscales y policías que allanó cerca de la medianoche del viernes la vivienda de la presidenta Boluarte, ingresó hacia las 4.30 horas (hora local) de este sábado al Palacio de Gobierno de Lima, donde continuará con las diligencias de una investigación abierta contra la gobernante.
Los fiscales anticorrupción y agentes de la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía Nacional del Perú (PNP) arribaron hasta la sede gubernamental, en el centro histórico limeño, tras permanecer durante más de cinco horas en la casa de Boluarte.
Tanto los fiscales como los policías que intervinieron en la operación señalaron a periodistas que la investigación es reservada y no pueden ofrecer más información sobre las pesquisas.
Los fiscales hicieron la operación con fines de registro e incautación de los relojes de lujo que, según mostraron medios locales, Boluarte usó en diferentes actividades públicas y supuestamente no ha declarado como parte de su patrimonio.
Mientras que la calle en la que se encuentra la vivienda de la mandataria fue cercada por un numeroso contingente policial, hacia la 1:30 del sábado (hora local) los vehículos del primer ministro, Gustavo Adrianzén, y del ministro de Relaciones Exteriores, Javier Gonzalez-Olaechea, llegaron al Palacio de Gobierno, además del ministro de Desarrollo e Inclusión Social, Julio Demartini.
Adrianzén declaró posteriormente a la emisora RPP que está “indignado” por el allanamiento y consideró que se ha producido “un intolerable atropello a la dignidad de la presidencia de la República y a la nación que ella representa”.
El primer ministro agregó que “no es posible” que tengan “que ser testigos de acciones absolutamente desproporcionadas y cuando no inconstitucionales”, ya que la gobernante está protegida por la inmunidad que otorga su cargo.
Además, aseguró que Boluarte “en todo momento ha presentado su colaboración al Ministerio Público” y que la gobernante está actualmente en la residencia del Palacio de Gobierno.