Fueron diseñados por el arquitecto Guillermo Schneider, a petición del empresario Enrique Turri, y construidos en 1929 con fondos dados en préstamo por la Caja de Crédito Hipotecario. Han sido señalados como uno de los principales hitos arquitectónicos de Santiago en la década de 1920.
El conjunto de tres edificios, de estilo art déco, se ubicó a un costado de la Estación Pirque —que fue demolida en 1943 dando origen al Parque Bustamante— y frente a la rotonda Baquedano. En el primer piso del edificio del centro se construyó un teatro («cine palacio») con capacidad para 2300 asistentes, que fue inaugurado en 1931 como Teatro Baquedano, y actualmente es el Teatro Universidad de Chile. El 31 de marzo de 1977 se inauguró a sus pies la estación Baquedano del Metro de Santiago.
Las construcciones han sido designadas «Inmueble de conservación histórica» por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Locales comerciales en el primer piso de los edificios e ingreso a la estación Baquedano del Metro de Santiago. Entrada del Teatro Universidad de Chile.
La Empresa “VENTANAS TERMICAS”, ubicada en calle Manuel Montt 2910, BARRIO Industrial km 90 en Rancagua, asociada a la CCHCR, se adjudicó el proyecto llamado a través de propuesta Pública. Proyecto que considera mejorar la habitabilidad de los departamentos y mejores condiciones de vida para sus ocupantes.
Dicho proyecto hacía muy exigente las especificaciones técnicas de ventanas, tanto en su diseño como fabricación e instalación.
Por tal motivo, las ventanas a instalar debían cumplir con altos estándares en eficiencia térmica, acústica y sistemas de seguridad, dada las características del sector que en los últimos años se ha constituido en el centro de celebración de acontecimientos y principalmente centro de protestas y conflictos sociales.
Según comenta, NICOLAS CARBACHO VEGA, Ingeniero Civil, profesional a cargo del proyecto.
A parte de cumplir con los estándares de nuestros productos, también existía la necesidad de cumplir con los plazos exigidos por el proyecto y que sin duda estaban condicionados a temas de fuerza mayor por la imposibilidad de acceder a los edificios. Además, se debía cumplir con la instalación sin afectar las fachadas dado que son edificios considerados de conservación histórica.
Estamos muy contentos por haber entregado nuestro trabajo al bienestar de la comunidad y haber cumplido a cabalidad las exigencias del proyecto. Comento.