La solidaridad con hechos concretos

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Escribe Miguel Carreño Céspedes, Presidente de SINATRACCH.

En marzo próximo, asume como Presidente de la República, Gabriel Boric Font, un liderazgo joven, que nació en los movimientos estudiantiles de hace diez años, y que congregó un respaldo histórico en las urnas, de una sociedad que sueña con la renovación de la política y que espera avances sociales significativos, a corto y mediano plazo.

Desde el mundo contratista, el que mueve Chile de norte a sur, en diversas faenas productivas, miramos con optimismo y esperanza el camino que iniciaremos a partir de este nuevo Gobierno. Confiamos que estos nuevos liderazgos sabrán respetar y cuidar a miles de trabajadores que trabajan, de sol a sol, para sacar adelante al país y a sus familias. Nos enorgullece decir que nuestro Sindicato Sinatracch tiene más de 87 mil asociados en 149 faenas de Arica a Punta Arenas, y estamos comprometidos con el futuro de Chile y su gente.

Sin duda, este Gobierno comenzará su gestión con un gran respaldo ciudadano, pero con una mochila muy grande de expectativas, en materia de reformas estructurales que permitan nivelar la cancha para quienes menos tienen. En ese enorme desafío, el Presidente Boric debe saber que contará con el apoyo de toda la familia de los contratistas de Chile, que siempre hemos luchado por mejores condiciones laborales al interior de las faenas y una mejor calidad de vida para quienes son el motor de nuestra patria.

El país que soñamos lo construimos entre todos, sin distinción. Nuestras historias son de esfuerzo y sacrificio, por lo que empatizamos con el dolor y las necesidades de los chilenos, durante estos años de pandemia y crisis económica. Conocemos de cerca la vida de las familias que luchan todos los días para salir adelante, responder sus compromisos económicos, pagar las cuentas básicas y alimentarse, con sueldos que no llegan a fin de mes.

En este escenario social y económico complejo, es hora de que la solidaridad no sea una palabra de buena crianza, sino que se exprese con acciones concretas. Es hora de que los grandes consorcios y multinacionales que se enriquecen en Chile con la energía eléctrica, el agua y las rutas concesionadas, se pongan la mano en el corazón y subsidien los consumos de las familias que menos tienen. Ya han ganado suficiente y pueden, sin problemas, condonar las deudas, sin repactaciones que volverán a ahogar a miles de chilenos.

El mismo llamado le hacemos a las 140 familias de súper ricos de Chile. Es hora de ser solidarios. ¿Cómo se comienza? Aportando recursos de sus patrimonios a la Pensión Garantizada Universal (PGU). Nuestros adultos mayores se lo agradecerán.

Porque si vamos a comenzar un gobierno de la gente y para la gente, se requiere que todas y todos piensen en la gente, desde el día uno. Señor Presidente electo, Gabriel Boric Font, para gobernar con la gente, cuente con los contratistas, apóyese en Sinatracch.