Sol radiante en primavera

583

Escribe Manuel Polgatiz, Periodista y Comentarista Deportivo.

El aroma a jazmín y coloridos frutos primaverales, despertaron el juego «Celeste» casi irreconocible en Concepción.

Muchos se escaparon de la pega; otros escondieron el celular bajo el escritorio; algunos escucharon por radio; y los más osados pegados a la pantalla computador, vieron el insospechado triunfo ante el «Campanil».

Tres puntos son bomba nuclear de oxígeno, que alimenta el alma desvalida del sufrido hincha rancagüino, que por los siglos de los siglos, ha debido sopesar más tristezas que alegrías.

En la Octava Región del país, fuertemente golpeada por el rebrote del coranavirus, el equipo forastero demostró en cancha y a pesar de los groseros errores arbitrales, que en este instante es más equipo que su rival y aún no necesita intubarse para recuperarse de los síntomas que hacían presagiar su extinción en Primera División.

Fue un 4-1 contundente, eficaz y sorprendente, que hizo saborear el almuerzo saludable e hipocalórico post fiestas patrias.

Antídoto preciso para recuperar el «herido» hígado que tanta faena dura tuvo el fin de semana recién pasado. A esta hora del encuentro familiar en la mesa, la lechuga sabe más fresca, el pescado más jugoso y la gaseosa sin gas, un manjar de los dioses.

Adiós a las carnes rojas, el tinto en la pera y los asados salados sobre la parrilla (qué asco, jajaja). Quedémonos con el juego del «inmenso» Gotti, un goleador de fuste, que tras dos años durmiendo siesta, despertó cuando a todos ya nos daba sueño y se dio cuenta que era futbolista profesional.

Graff escapa y en buenos términos, de la guillotina deportiva. Torrealba expuso credenciales para ser central. Cereceda, viejo zorro, se unió a Fernández y construyeron fútbol y Arancibia con su gol «Maradoniano» del mundial EEUU ’94, estampó la rúbrica en la senda triunfal.

¡Felicitaciones a todos porque fue merecido!. Pero de poco y nada valdrá si no se confirma con Coquimbo la próxima semana.

Partido de 6 puntos. Partido a muerte. Una final. Punto de inflexión, frases fomes y clichés que inventamos los comunicadores, pero p… que cobran sentido cuando la «pelá» del descenso nos hace cosquillas en las patas.