En el marco de la conmemoración del Día Nacional de los Pueblos Indígenas, el ministro de Bienes Nacionales, Julio Isamit, dio a conocer las cifras de inmuebles fiscales que han sido asignadas a  comunidades, organizaciones y personas indígenas del país durante este gobierno, que permiten poner en valor la cultura ancestral de nuestros pueblos originarios y promover que la ciudadanía en general la conozcan y respeten.

De esta forma, el catastro arrojó que, durante la administración del Presidente Sebastián Piñera, Bienes Nacionales ha tramitado un total de 411 expedientes positivos, cuya superficie corresponden a 30.106,08 hectáreas de terreno fiscal asignados para el desarrollo de nuestros pueblos indígenas a lo largo de todo Chile.

“Nuestro compromiso con el desarrollo de los pueblos originarios es integral y, responde, no sólo a la importancia de la cultura, identidad y puesta en valor de nuestros pueblos, sino que también del buen uso que le damos al territorio fiscal que nos pertenece a todos los chilenos, para que vaya en directo beneficio de la comunidad”, dijo el ministro Isamit.

Sobre ese punto, el secretario de Estado informó que, el principal uso que se le da a estos inmuebles fiscales es principalmente para proyectos de emprendimientos, desarrollo agrícola, centros patrimoniales y fines habitacionales.

Respecto a la regularización de los títulos de dominio, para que las personas de origen indígena puedan ser dueños de sus hogares, el titular de Bienes Nacionales detalló que, entre el año 2019 y mayo de 2020, se han tramitado 216 solicitudes a lo largo del país.

“Estamos trabajando con sentido de urgencia para convertir a Chile en un país  de propietarios. Sabemos que ser dueños de su propiedad les mejora profundamente la calidad de vidad a las personas y, por eso, nuestro compromiso para el año 2020 es resolver 620 casos de familias que que se registran en materia indígena”, informó el ministro Isamit.

También aprovechó la oportunidad para informar que desde Bienes Nacionales  se ha avanzado en el programa de Rutas Patrimoniales que considera la creación, actualización/mantención, difusión/promoción y oferta/administración de rutas con componente indígena, como la Ruta del Esclavo y la de Cultura Chinchorro, Patrimonio en Arica; la de Budileufú en La Araucanía, la Te Ara o Rapa Nui en Valparaíso, entre otras.