Las diligencias buscan esclarecer supuestas irregularidades en la adquisición de 170 respiradores por al menos el triple de su valor en medio de la emergencia por el coronavirus. Otros tres ex funcionarios también fueron enviados a prisión preventiva.

Después de una larga audiencia de medidas cautelares, que se extendió por más de 10 horas, este domingo, el juez undécimo de instrucción en lo penal, Hugo Huancani, determinó detención preventiva, por un lapso de 3 meses en la cárcel de San Pedro de la ciudad de La Paz, para el ex ministro de Salud Marcelo Navajas, por la investigación sobre la presunta compra irregular de 170 respiradores para la lucha contra el COVID-19 en Bolivia.

Los ex funcionarios del Ministerio de Salud, Giovanni Pacheco, de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico; el director Jurídico del Ministerio de Salud, Fernando Valenzuela, y el testigo denominado “clave” Luis Fernando Humérez, fueron enviados al penal de San Pedro por 6 meses.

Para la ex funcionaria de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico del ministerio de Salud, Ana Fernanda Espinoza, y la Consultora del Banco Interamericano de Desarrollo, Gabriela Claudia Pérez, el juez dictó detención domiciliaria por 6 meses, sin salida laboral.

La información fue proporcionada por el fiscal Ruddy Terrazas, miembro de la comisión de fiscales que llevan adelante la investigación, tras concluir la audiencia de medidas cautelares.

Inmediatamente, los abogados de los acusados presentaron ante el juez Huacani una apelación a la determinación, argumentando que la Fiscalía no pudo sustentar los supuestos delitos de corrupción por los que son acusados sus defendidos.

Rosario Canedo, abogada del ex ministro de Salud, Marcelo Navajas, además advirtió que su defendido sufre de una enfermedad cardiaca grave y que estar en prisión representará un riesgo para su vida.

El caso investiga una compra en al menos el triple de su valor de 170 respiradores a una empresa en España. Estos están destinados a hospitales de Bolivia para pacientes críticos con coronavirus, sin embargo, en el país agrupaciones médicas han alertado que sólo sirven para emergencias y no para terapia intensiva.