Escribe Roberto González M., Director de Carreras del Área Actividad Física y Deportes, CFT Santo Tomás Rancagua.
Este 6 de abril lo estamos viviendo de una manera distinta, “lo estamos viviendo con una nueva pandemia” que aqueja a nuestro planeta. Pandemia que nos hace repensar y analizarnos desde lo más profundo de nuestro ser biopsicosocial. Siendo lo más seguro que estemos leyendo estas letras cumpliendo de alguna manera la cuarentena sugerida por los sistemas de salud de nuestros países y las organizaciones mundiales que velan por el cuidado sanitario.
Pandemia por el Covid-19 que aqueja a todos los grupos etarios, principalmente a los menores de edad, personas mayores y a la población con alguna enfermedad respiratoria aguda y que, en muchos casos, puede llevar hasta la muerte. Desde su aparición en diciembre de 2019 ya suma, hasta el 4 de abril del presente año, la cantidad de 64.024 muertes, según información entregada por la OMS.
Pero cuando comencé estas letras diciendo: “lo estamos viviendo con una nueva pandemia”, hacía referencia a que ésta se viene a sumar a una que de igual manera ha sido declarada como tal por la OMS y que nos afecta desde hace años. Quizás es mucho más silenciosa que la que estamos combatiendo en la actualidad, pero no por eso menos dañina y que de igual forma llega a ser mortal: la Obesidad.
Esta pandemia lleva asociada anualmente la muerte de 2,8 millones de personas en el mundo, según datos entregados por la OMS. A diferencia del virus Covid-19 no se contagia a través de otras personas, por lo que cae en la clasificación de las enfermedades no transmisibles. Es ahí donde está lo más contradictorio de esta pandemia, ya que entonces en muchos casos se podría decir que, ante la obesidad, yo decido padecerla, yo conscientemente “me contagio” con ella.
Que esta cuarentena que estamos viviendo a causa de la pandemia del Covid-19 sea la oportunidad de reflexionar junto a nuestras familias si en este 6 de abril queremos también comenzar a luchar contra la obesidad, que nos está restando calidad de vida y que además nos está llevando a la muerte. Por eso, que esta cuarentena te haga mirar tu casa como un espacio donde compartir con tu familia, donde puedas hacer actividad física con ellos. Tu casa cuenta con muchos recursos que puedes utilizar para hacer algún tipo de ejercicio físico: peldaños, escaleras, sillas aspiradoras, bidones de agua, kilos de arroz, celulares que aportan alguna aplicación para hacer alguna actividad, para tomar los tiempos, etc.
Si para combatir el Covid-19 aprendiste a lavarte las manos más frecuentemente, a usar mascarilla, a estornudar entre tu brazo y antebrazo y a mantener una distancia social, también puedes decidir volver, incluso en esta cuarentena, a moverte más. Volver a caminar más, volver a usar más escaleras, volver a bailar, etc., porque como lo dice el eslogan Día de la Actividad Física para este año, hay que recordar que “todo paso cuenta”.