Los aportes vendrán a mejorar la calidad de vida de las familias, ya que implica que el revestimiento mejore la aislación de las viviendas en extremo calor y frío.

Una importante entrega de subsidios PDA realizaron durante el pasado jueves el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto Romero, y el director del Serviu, Manuel Alfaro, quienes entregaron los certificados a 69 familias de los sectores de Isabel Riquelme 2, San Vicente de Paul, Villa Galilea 2 y Comité villa Lourdes.

Estos subsidios vendrán a mejorar la calidad de vida de estas familias, mediante la instalación de modernos sistemas de aislación que provee a los hogares de más calefacción en invierno y menos calor dentro de las viviendas en verano. De esta manera se logra un importante nivel de ahorro en los gastos de cada una las familias.

La presidenta de la Junta de Vecinos de la Isabel Riquelme, Cecilia Osorio, señaló que el beneficio ha sido bien recibido por sus vecinos y sus resultados son óptimos “nuevamente vamos con 19 casa ahora. Antes nos hicieron 58 casas y todos los edificios de la población Isabel Riquelme y se nota el cambio de temperatura dentro de las casas tanto en invierno como en verano”, indicó la dirigente.

Por su parte, la presidenta de Villa Galilea B, Maribel Berrocal, señaló que “todos están muy contentos, y reconocen que se ahorra mucha energía porque no hay que calefaccionar tanto tiempo las casas, el que es el objetivo principal de este subsidio. Los demás vecinos que ven este cambio tanto en la estética como en la funcionalidad de sus casas, quieren lo mismo y los entusiasmó, es por eso que quieren seguir postulando”.

El Director del Serviu, Manuel Alfaro, también indicó que es un beneficio que va directo en beneficio del bolsillo de las personas, y que este esfuerzo es siempre en apoyo a las familias “lo que buscamos es que la gente en invierno pase menos frío, que inviertan menos plata en calefacción, y que la gente tenga un mejor estándar de vida”.

El alcalde de Rancagua, Eduardo Soto Romero, invitó a toda la comunidad presente a seguir trabajando y organizándose mediante sus juntas de vecinos para que estos recursos sean invertidos en el mejoramiento de sus viviendas, lo que finalmente se traduce en mejor calidad de vida y ahorros significativos en los ingresos familiares.