Al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, podría costarle muy caro haberse pintado la cara de negro durante un baile de disfraces cuando tenía 29 años.

(Euronews).- Esta polémica se produce cuando queda solo un mes para las elecciones generales en Canadá. La revista Time ha sacado a la luz la comprometedora foto en la que se ve a un sonriente Trudeau, disfrazado de Aladino, con turbante, la cara negra y rodeado de cuatro jóvenes mujeres, a una de las cuales rodea con el brazo.

Trudeau pide perdón

«En 2001, cuando era profesor en Vancouver, asistí a una fiesta de fin de curso cuyo tema eran «Las mil y una noches». Y yo, me vestí con un disfraz de Aladino y me puse maquillaje. No debí hacerlo. Debería haber sido consciente, pero no lo fui. Y lo siento mucho», ha dicho el primer ministro canadiense.

En Canadá, como en Estados Unidos, esta no es una cuestión baladí. El propio Trudeau ha calificado su disfraz de «racista».

Lo peor es que la polémica cae en plena campaña electoral y que, para más inri, uno de sus rivales y líder del tercer partido político del país, es de origen sij y siempre viste con turbante.