Durante la jornada del jueves el fiscal nacional, Jorge Abott, decidió trasladar a la Fiscalía Regional Metropolitana Sur la causa que investiga la presunta corrupción que involucra a tres ministros de la Corte de Apelaciones de Rancagua, quitándosela de las manos a la fiscalía regional de O’Higgins.

(BiobioChile).- Lo anterior se da tras una denuncia de un fiscal adjunto de la zona, Sergio Moya, el mismo que pidió la formalización de uno de los jueces indagados por corrupción y que ahora inició la acción contra su superior, el fiscal regional de O’Higgins Emiliano Arias.

Dicha denuncia, a la que tuvo acceso exclusivo Radio Bío Bío, apunta a un eventual tráfico de influencias en el caso Caval, obstrucción a la justicia en la investigación contra el ministro Elgueta, ocultamiento en la causa del Teatro Municipal de Rancagua y violación de secreto por sustracción de información de la base de datos de la Fiscalía de O’Higgins que llegó a manos de un particular en Puerto Montt.

Tráfico de influencias

El fiscal Emiliano Arias realizó sólo una intervención en el Caso Caval, la cual se llevó a cabo en diciembre de 2017 y consistió en un intento de realizar un procedimiento abreviado al síndico de quiebras Herman Chadwick Larrain.

Según detalla el fiscal Moya, se le plateó que se debía terminar con esa arista, porque la presencia de Chadwick en la causa y un eventual juicio oral, podría traer consecuencias para la imagen del gobierno entrante.

Fue por eso que Arias intentó realizar un juicio abreviado, pero con penas que estaban fuera del marco legal, mucho más bajas de las establecidas.

Ocultamiento

También se denuncia el caso de la investigación contra el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, por malversación de caudales públicos por cerca de 3500 millones de pesos en la construcción del Teatro Municipal de Rancagua.

El fiscal Moya asegura que fue convocado a una reunión donde se encontraba el abogado del alcalde, que estaba imputado por este caso, y fue instruido por Arias para estar atento a los requerimientos del jurista.

Tras esto solicitó autorizaciones judiciales para incautar computadores, ipads y aparatos electrónicos del alcalde, sin embargo el fiscal Arias le ordenó devolver las especies.

Pese a lo anterior, el fiscal Moya no las devolvió por tratarse de una investigación por malversación de caudales públicos.

Moya explicó que hay antecedentes que se deben procesar y que ameritan que la causa que investiga corrupción en la corte de Rancagua se traslade a otra fiscalía, pero aseguró que el permanecerá indagando e incluso podrá trabajar más rápido.

El fiscal Nacional Jorge Abott ya está en conocimiento de toda esta información, la cual fue entregada mediante un detallado informe enviado por el fiscal Moya durante la jornada de este viernes a la Unidad de Asesorías Jurídicas de la Fiscalía Nacional.

“Yo tengo la tranquilidad absoluta de que estos hechos que yo hice saber formalmente a la Fiscalía Nacional, los conversé con él (fiscal Emiliano Arias), los analizamos y de alguna forma se adoptó un compromiso de que no se iba a incurrir en este tipo de conductas, pero la reiteración y la persistencia en lo mismo es lo que me hace tomar la decisión que en lo laboral es muy complejo. En esta región, en todas sus fiscalías, hay gente muy valiosa que se saca la mugre trabajando, y esto de alguna forma claramente enloda”, señaló el fiscal Sergio Moya.